El otro lado del colchón

«Deja un poco abierta la puerta…que corra el aire» Así fue como entró de golpe el olor de viejos pasos. Él empezó a reseguir con el pulgar manchas de otros tiempos en el colchón. «Algunos corazones sedientos gotean… ya sabes». Pero en la plataforma de látex, una sola forma, un único hueco apenas marcado. Como queriendo hacerle un molde a ese cuerpo tan menudo. Un solo hueco, en un solo lado. «Aunque duerma sola, nunca me acostumbro a ocuparla toda». Al otro lado del colchón, el espacio sin marcas delataba el pensamiento de que todo llega si se le deja un lugar.

Lucha lenta de tendones. Descubrirse desnudos, hablándose. Melancolía de humo que ascendía perezosa y lánguida hasta llenar el techo. El pelo de ella llevaba meses, años, con muchos afanes enredados. Hacía tiempo que no se peinaba. Sencillamente, no le daba la gana.

«Esta noche, quédate». Y él ocupó rincones, cafés, cenas, cines. Emociones de segunda mano. Ella creió que uno de esos días él, quizás, podría llegar a desenredarle el pelo.

«Esta noche… quédate».

Jordi&Lorenafirma10
Jordi&Lorenafirma21
Jordi&Lorenafirma32

underwater photography

Otro post en blanco y negro. Que repetitivo. ¿Por qué no han podido poner esta vez algo con más color, menos uniforme? Aunque si lo miras bien, entre el blanco y el negro hay unas cuantas tonalidades de grises. Y así nos evitamos hablar de colores que en realidad no existen. Como el «color sandía», por ejemplo… con lo fácil que es decir «rojo».

Hace unos días me desperté mirando la ciudad y pensé que si tuviera varios enemigos les sentaría uno por uno en una fila. Me pararía enfrente, las piernas bien rectas, separadas lo justo como para impresionar, las manos en jarras, la mirada directa. Me pararía enfrente y les diría que quizás un día se despierten para oír cómo toda la ciudad se está riendo de ellos… y quizás algún día, sea cierto.

Siempre que voy al bosque tengo la misma sensación de perpetuidad. Perpetuidad de él, no de nosotros. Esa tranquilidad medio irónica al saber que me iré y cambiaré, sucederán hechos, experiencias, sentiré, pensaré, me agitaré. Pero el bosque seguirá casi igual por mucho que a mí me suceda. Tan perenne, tan continuo, tan fluido. Siempre pienso en que debería acordarme más del bosque cuando no estoy en él. Siempre pienso que debería acordarme, pero luego siempre se me olvida. Igual que esas rocas amarmoladas, que seguirán exactamente como las veo a pesar de que nos hayamos ido. A pesar de todo lo que nos pase. Por mucho que gritemos, alabemos, resolvamos. Seguirán igual… y es que aquí cada uno va a su rollo. Aquí, en este universo.

fotografia acuatica

Amanecer desde el Teide

_J3I6774 copia copia

Me acoge un lugar en el que no hay aguacates cuando los campos se incendian. Donde tampoco hay lechuga cuando ha llovido tanto que se se ha podrido la última cosecha. Donde la chica que trabaja en el supermercado nos dice «hay que esperar a que se regeneren los campos». Me acoge un lugar que me hace bajar el ritmo y subir la intensidad que está en lo simple, en lo que no necesita nada más que lo que es. Ahora pienso que tiene algo de sincronía el hecho de que uno de los regalos de este año, de este ciclo de la tierra que languidece para dar paso a otro despertar, fuera un amanecer desde el Teide.

Gracias Canarias por recordar a esa parte de mí caprichosa y asfaltada que en este planeta, por mucho que nos empeñemos, los elementos mandan.

El abuso de los atardeceres

Puedo decir que me doliste. En un lugar que aún no he identificado, medio claro medio oscuro, de emoción más que de carne, me doliste. Todos esos “ya pasó” resbalan… y por fin puedo decir que me doliste.

Busqué dónde se quedó la herida pero ese lugar nunca se había herido antes… y ahora el rasguño está oliendo a cicatriz menos de lo que me gustaría. Pasarán días, semanas, años y dejaré de sentir esto tan poco identificable, con tantos matices que aprendí como puede hacerlo alguien de 80 años con alma de recién parida. Me siento un poco como esa tierra volcánica de aquí enfrente que quiso sobrevivir a un incendio pero tuvo que ver quemar sus árboles. Dramática, sí… pero ya hace un rato que sé que de todo se aprende. Y llegará el día en que me hará gracia saber el por qué de aquél llanto tan unidireccional, tan (solo) mío. Quizás hasta sonría al recordar que me doliste.

Y me sale un Neruda adolescente ahora diciendo “aunque éste sea el último dolor que ella me causa… y estos sean los últimos versos que yo le escribo”

Soul surfing

[CAS] Me han recomendado hacer listas al revés. Listas de lo que has hecho. De lo que tienes. De las metas que ya alcanzaste. Así que en lugar de hacer de hacer una lista de cosas que echo de menos, voy a hacer una lista de cosas que echo de más.

Echo de más el asfalto, el olor denso, los cláxons, la gente que sólo sonríe un poco. Echo de más la angustia de correr sin saber ni hacia dónde ni para qué, solo porque los demás lo están haciendo. Echo de más una casa con muebles negros, la punzada de verte sola buscando en un gramo de grasa inexistente el significado de tu frustración. Echo de más tantas luces de noche, tantas pocas de día. Echo de más las compras apelotonados, un mar tan inalcanzable que no se inmuta, miradas que se volvieron grises de tanto mirar al suelo. Y en todo lo que echo de más, podría decir algo que echo de menos. Entendí que es necesario lo oscuro para la luz, lo dulce para lo salado.

Ahora ya podemos añadir algo más a la lista de metas alcanzadas. Hicimos una foto frente a la que podrás detenerte para enseñar a tus nietos.

[ENG] Someone recommended me to make lists backwards. Lists of what I’ve already done. From what I already have. Of the goals that I achieved already. So instead of making a list of things that I miss, I’ll make a list of things that I don’t miss.

I don’t miss the asphalt, the heavy smell, the horns, the people who just smiles a little. I don’t miss the anxiety of running without knowing where or why, just because the others are doing it. I don’t miss a house with black furniture, the pang to see you looking in one gram of nonexistent fat the meaning of your frustration. I don’t miss so many lights during the night, so few during the day. I don’t’ miss crammed purchases, a sea so unreachable sea that doesn’t even bat an eyelid, the eyes that became gray from staring so much at the floor. And in everything that I don’t miss most, I could say something that I miss. I think I finally understood that the light needs the darkness, the salt needs the sugar.

Now we can already add one more thing to the list of goals we achieved. We got to took that picture in front of which you could stop to show your grandchildren.

Sereia de água dolce

«Andando de manhãzinha
Um cumpadre amigo meu
Se assustou com a moça linda
Que passou ao lado seu
Correndo ele veio avisar
Branco, tremeu, gritou
Você não vai acreditar
Na sereia que aqui passou

De onde ela é?
É do Bonito quem diz
É o que preciso
O rio Bonito é feliz
É o paraíso
O rio Bonito senhor
Não fica triste
Praia coberta de flor
Sempre resiste…»

Sereia de Água Dolce (Maria Bethania)

Felicidad / Happiness

[CAS] Cuando intento escribir en los últimos meses siento que las palabras de antes me quedan grandes. La costura de la frase siempre cae más abajo de donde termina mi hombro. Una de las pocas cosas que ponían de los nervios a mi abuela.

Cuando miro un año atrás, me parece que hayan pasado treinta. Todo para hacerme ver que la felicidad es mucho más facilona de lo que creía. Una mezcla exacta de intensos diálogos que barren las dudas. Mucho sol y poca sombra. Una cámara fiel. Un trozo de ola. Que cualquier miércoles sea un domingo. No saber dónde están los zapatos de tanto tiempo que estoy sin ellos. Un trabajo al que mimar creando. Luz que se filtra entre el azul de mar y aire… Y algunos ratos de piel desnuda.

[ENG] When I try to write in the last months I feel that the words I used before are too big for me. It’s like if the seam of the sentence always falls below my shoulder. One of the few things that put my grandmother on her nerves.

When I look back one year, it looks like thirty. And I realize that happiness is much more easy than I thought. An exact mix of intense conversations that sweep the doubts. Lots of sun and little shade. A faithful camera. A bit of a wave. Any Wednesday becoming a Sunday. Not knowing where are my shoes, after having been so long without wearing them. A job to take good care while creating. Light that filters through the blue of the sea and the air… and some moments of bared skin.

La memoria del incendio / Fire memories

[CAS] En esta zona del globo tan revuelta, los incendios de verano llegaron avivados por quien no quiere invertir demasiados recursos ni en controlarlos, ni en prevenirlos. La isla que me cobija ardió durante días, el fuego devoró también buena parte del norte de mi tierra. Impotencia. Suerte que el bosque es sabio… y sabrá crecer entre las cenizas. No sé si sucederá lo mismo con nuestra sociedad occidental, que arde sin saber para qué ni hacia donde. Demasiada acumulación de países de locos, señoras y señores.

Mientras el fuego avanzaba por el barranco que de verdad debía parecer un infierno, el aire en la playa era cada vez más denso. Y las cenizas empaparon el agua.

[ENG] In this messy area of the planet, summer fires came flared up by who don’t want to invest too many resources on controlling or preventing them. The island that shelters me burned for days, the fire consumed too much of the north of my country. Impotence. But the forest is wise … and it will know how to grow from the ashes. I don’t know if the same thing will happen with our Western society, which burns without knowing why or where. I guess we have an excessive accumulation of crazy countries, ladies and gentlemen.

As the fire progressed into the gorge that really may look like hell, the air at the beach was becoming denser. And the ashes soaked the water.

Natación sincronizada / Synchronized swimming

[CAS] Mucha Agüita estos meses. La mezcla de proyecto que vale con la sensación de estar en familia, me están haciendo imposible el desapego.

Nuestro último trabajo juntos fue en una exhibición de natación sincronizada con el Club Natació Manresa y los trajes de baño de Agüita. Ya hemos visto lo que sucede sobre de la superficie cuando las sirenas tienen ensayado un baile. Ahora nos preguntábamos, en esa harmonía de subidas y bajadas, de piernas y brazos siguiendo el mismo ritmo… ¿qué estará sucediendo debajo?

[ENG] It’s a lot about Agüita those months. The combination of a project that it’s worth and the feeling of being part of a sweet aquatic family, are making detachment impossible for me.

Our last work together was an exhibition of synchronized swimming with the Club Natació Manresa and Agüita‘s swimwear. We have already seen what happens above the surface when the mermaids have rehearsed a choreography. Then we wondered, in this harmony of ups and downs, legs and arms following the same beat … What would be happening under it?

Sigo buscando musas

ANDO MECIDA POR LA MÚSICA DE UNA EMISORA DESINTONIZADA, que combina con bastante torpeza baladas desgarradas y rumbas descaradas. Mejor dejar las promesas en falso de «voy a publicar más en el blog» … y dejar que fluya el verso. Cuando y cómo le venga en ganas. Dejemos que fluya.

Una terraza al sol, en una plaza que parece que la ciudad le robó a un pueblo. En un despiste ocuparon la única mesa libre. Y mi café y yo nos sentamos delante de una anciana sin dientes. Hablamos, se ríe, me río. Se va… ya no me da miedo hablar con la gente. Puede que sea el efecto de un nuevo proyecto que nos hace desempolvar historias de amor de desconocidos. Historias de amor que no se avergüenzan. Sea como sea, a estas alturas, he escojido quitarme suavemente la coraza.

Mientras tanto, mi cabeza sigue enloqueciendo por las musas de agua y luz que se dibujan antes de encontrarlas. Y con un «coja su turno», van haciendo cola hasta el momento en que les toque entrar en escena. Una mañana, le tocó el turno a una sirena venida de tierras del norte. Si queréis ver más fotos de esta sesión, las encontraréis si clickais en www.bodalicious.net.

Sobre el mar de nubes

EN UN MUNDO DE FORMA PERFECTA, QUE ORBITA SIN DESCANSO, es posible encontrar un lugar en el que el tiempo no pase. Un lugar de uno, donde la respiración no se busca, sucede. Un lugar en el que uno aprende a despegarse los tentáculos del miedo y a curar los moratones que han causado, de tantos años que llevaba pegado.

En un mundo de forma perfecta nos encontramos y conectamos. Reconociéndonos seres solitarios y sociales al mismo tiempo. Buscando espacios a la vez que nos complacemos creando halos de luz comunes. Esa manera de levantar las cejas cuando uno se sorprende entendiendo, nos entendemos con poco. Con poco, basta.

Buceando con tortuga verde (Chelonia mydas)

HAY UN LUGAR DE TENERIFE DONDE APRENDÍ QUE LAS TORTUGAS HABLAN. En ese lugar habita una familia de tortuga verde (Chelonia mydas), una especie amenazada. Solemos ir a visitarlas a menudo y no hay día en que no nos encontremos con centros de buceo. Desde la superficie, les observamos.

Estos centros de buceo llevan a sus clientes no sólo a ver a las tortugas, sino también a alimentarlas para atraerlas, a cogerlas del caparazón, a darles la vuelta, a atraparlas por las patas… Qué necedad romper un equilibrio del que al final, ellos también están viviendo. ¿Dónde llevarán a sus turistas si un día esas tortugas desaparecen?

Busquemos nuevas maneras de mirar y en lugar de tratar a un animal salvaje como si fuera un perro, contemplémoslo. Aprendamos su lenguaje de acercarse y alejarse, mirarte de frente o de lado… contentas, de mala leche, sociables, un tanto agobiadas, serenas. Será verdad que en todo lo vivo existe la expresión. Nosotros, de tanto mirarlas, empezamos a entender su comportamiento. Con ello y sin querer, nos vamos adaptando al ritmo que este mundo de forma perfecta marca.

Reflexiones de fin de año (supongo)

HACE UNOS DÍAS QUE ME QUEJO POR DENTRO. Las dudas trotaban a lo loco, dándome coces en la cabeza. Hoy, se rompieron todas en un chasquido de luz, como si una bombilla encendida se hubiera caído al suelo. Cada vez estoy más cerca de donde quiero estar, cada vez más y mejor. Y entre tanta queja, incertidumbre, tambaleos y miedo, no me había dado ni cuenta.

Nos enseñan a prevenir, la mirada en negro para crearnos espacios de falsa seguridad. Cuando al final, puede que sólo se trate de cerrar los ojos, calcular el salto y lanzarse al vacío. Quizás caigamos sobre un suelo de hormigón o quizás crucemos una superficie azul para entrar por fin en una agua clara, suave, como en casa. Sea como sea, hagamos que valga la pena haber volado.

Rasguños

LA HERMOSURA DE UN ABISMO, UNA GRIETA DE CRISTAL. Mi boca abierta y unas manos que tiemblan. Ayer se me rompió el ojo de pez en dos. Aprendí a ver qué tiene valor para mí y qué no tanto, cuando lo primero que pensé al ver esa grieta en el cristal fue: «Ahora no puedo hacer fotos en el agua». Ahí nació el temblor.

Un tiempo sin duda de aprender a desprenderse, a vivir sencillo. He llegado al punto en que me es fácil. En esta isla, me es fácil. El tiempo se olvida, se escurre, se vive.

Y en cada rasguño… una oportunidad y un comienzo.

Golpe de riñón

ME DIJERON QUE LA TIERRA ESTÁ ARDIENDO, que cuece, que de tanto brotar se hará espuma. El norte será sur y el sur será norte. Quizás así se vayan disolviendo las fronteras. Quizás así, con un golpe de riñón, nos atrevamos a llegar hasta el fondo.

Y mientras tanto, en cada paso te cruzas con gente que habla tu mismo lenguaje. Gente con la que no hace falta hablar para entenderse. Gente de lejos y de cerca. Gente que conoces de hace unos minutos que parecen siglos. Gente que, en lo que se considera “un rato”, ya sientes como familia.

Gente que rompe lo que esperabas, que va más allá, que te deja cálidamente desnudo.

Es como si la Tierra ahora girara más rápido… y se fueran cerrando los círculos.

Bonito

«(…) La cosa va mal, la vida le pesa
Que vivir así ya no le interesa
Que seguir así no vale la pena
Se perdió el amor, se acabó la fiesta
Ya no anda el motor que empuja la tierra
La vida es un chiste con triste final
El futuro no existe pero yo le digo
Bonito, todo me parece bonito (…)
Bonita la paz, bonita la vida
Bonito volver a nacer cada día (…)
Bonita la gente cuando que no se arrepiente
Que gana y que pierde, que habla y no miente
Bonita le gente por eso yo digo
Bonito todo me parece bonito (…)
La mar la mañana, la casa, la samba,
La tierra, la paz y la vida que pasa.
Bonito, todo me parece bonito.
Tu cama, tu salsa, la mancha en la
Espalda, tu cara, tus ganas (…)
Bonita la gente que viene y que va
Bonita la gente que no se detiene
Bonita la gente que no tiene edad
Que escucha, que entiende, que tiene y que da (…)
Bonito, todo me parece bonito (…)»

«Bonito», Jarabe de Palo

Pase lo que pase en la tierra… una se acerca a la sal, saca cuatro fotos y todo le parece bonito.

Tenerife

UN CAFÉ DE AQUELLOS DÍAS EXTRAÑOS. Una terraza en una plaza de Gracia. Una marca de rueda de bicicleta en tus pantalones blancos. Tu cabello a medio rapar. Un «hace demasiado que no nos veíamos». Un «no puede ser, a partir de ahora vamos a vernos más». Un saber que era mentira. Sólo eso bastó para que me convencieras de que la fragilidad es buena… de que nos hace cercanos, nos hace humanos. Una fragilidad que quise mirar de frente. Y no me salía el llanto.

Decidí volar a una isla de ritmo absorvente donde el clima me reconoce. Donde puedo decir sin que suene incoherente que vale la pena vivir sencillo. Delante de mí, un océano de calma a pedazos, un césped, ocho palmeras, un porche de cuatro columnas de madera. El aire rojo y azul, que no dice nada. Conexión y fluir de luces que se reconocen. Paz. Creo que necesitaba esto.

Quise sin querer llenar tu pantalla con una prosa de versos flotantes que ahora quiero convertir en algo tan vanal como un diario. Para que quede marcado en algún sitio cómo va siendo llenar de verano mi invierno. Chapurreado, inevitablemente, de mis absurdos desvaríos. Porque hay cosas que nunca cambian.

Empezaré con un madrugón a medias y unas olas que de momento observé desde fuera, huyendo de conversaciones ajenas sin conseguirlo, en la Playa de las Américas, en Tenerife.